Cartas e Mensagens

Carta de Fabricio Ojeda a Fidel (1964)

Aquí siempre, como siempre: empeñados en superar el cúmulo de dificultades transitorias para incrementar la lucha sobre bases de mayor seriedad y precisión. En este propósito hemos avanzado un tanto. El paso fundamental ha sido indirectamente a la solución de los problemas de dirigencia, a la estructuración de los organismos nacionales, como son el Comité Ejecutivo del FLN y el Comando Ejecutivo de las FALN, punto de partida para una reorganización general de toda la estructura del movimiento, a cuyos fines se trabaja afanosamente para celebrar cuanto antes una conferencia nacional FLN-FALN, que a manera de poder constituyente se aboque al estudio y análisis de la situación, delibere sobre la estrategia y táctica, sobre la línea política y militar, y dictamine acerca de la constitución efectiva de los organismos de dirección a todos los niveles. En esta forma el movimiento liberador saldrá del estado actual de estancamiento, superará las divergencias y clarificará sus proyecciones históricas; además de consolidar el elemento principal para avanzar, la unidad revolucionaria de las fuerzas revolucionarias.

“Nuestro empeño de orientar la lucha sobre nuevas bases nos ha llevado a concretar determinadas cuestiones de importancia. Es la primera la reestructuración provisional de los actuales organismos de dirección nacional FLN-FALN. En este sentido, hemos resuelto ampliar los núcleos de dirección existentes, lo cual ha producido una situación crítica en el seno del Partido Comunista Venezolano, con la sanción, por parte de la mayoría del Buró Político de ese Partido, del compañero Douglas Bravo, quien ha sido bajado de ese organismo acusándosele de actividad fraccional antipartido.

“Es la segunda la decisión de enfrentarse a cualquier circunstancia para aglutinar a todas las fuerzas revolucionarias en torno al incremento de la guerra de liberación nacional como único medio para avanzar hacia la conquista del poder y el logro de la independencia nacional, tomando en cuenta las condiciones objetivas del país y las particularidades del proceso venezolano.

“En ambos aspectos hemos avanzado. Ya se procedió a crear una dirección político-militar única FLN-FALN. Esta está encabezada por mí, por Douglas Bravo, en calidad de presidente encargado del FLN y primer comandante encargado de las FALN, respectivamente, y un dirigente del MIR que en carácter de secretario general del mismo se incorporará en el curso de la presente semana.

“A la Comandancia General de las FALN se han incorporado los primeros comandantes de los frentes guerrilleros. A tal conclusión se llegó después de analizar la situación actual de esos organismos, pues se consideró que el núcleo de tres miembros del C.G. FALN que quedaba con vida activa era insuficiente para la dirección militar general, ya que el resto de los integrantes se halla prisionero o en el exterior. Y en cuanto a la aglutinación de las fuerzas revolucionarias en torno al incremento de la guerra de liberación nacional, se designará una comisión unitaria que estudie y prepare los materiales teóricos sobre estrategia, táctica y líneas política y militar del movimiento para ser discutido en la próxima conferencia nacional FLN-FALN.

“La incorporación del MIR a los organismos de dirección y a las tareas preparatorias de la conferencia es un paso de gran importancia, pues en esta forma se abre un período de discusión interna sobre las divergencias actuales, se suspende la diatriba en la polémica y se abren cauces verdaderamente democráticos para la unidad del movimiento revolucionario en lo ideológico y en lo político.

“Sin embargo, se presenta una nueva brecha en nuestro seno como consecuencia de las medidas disciplinarias adoptadas por la mayoría del Buró Político del Partido Comunista Venezolano. Respecto a este nuevo problema estoy informado de que los organismos medios y de base, incluso en el propio Comité Central, han venido reaccionando contra la sanción impuesta al compañero Douglas. Ya han comenzado a circular algunos documentos que expresan categóricamente esa reacción. A mi juicio, las medidas disciplinarias tomadas por la mayoría del B.P. obedecen a problemas de claro carácter ideológico y político, a cuestiones de fondo, que se han pretendido escudar tras el uso de los métodos o de presuntos errores por parte del compañero Douglas y de otros compañeros que coincidimos con él en relación con los aspectos estratégicos y tácticos de nuestro proceso revolucionario. Y es que en el seno del Partido Comunista de Venezuela se debaten dos importantes corrientes de opinión.

“Una, la minoritaria en la base del Partido, pero que ha tomado cuerpo en los miembros del Buró Político y el Comité Central, cuya esencia es la siguiente: Los procesos en marcha permiten al movimiento revolucionario tomar la iniciativa en el frente político; sin embargo, será necesario que las FALN ordenen un repliegue de las guerrillas y U.T.C. (Unidades Tácticas de Combate). No se trata de una nueva tregua, sino de algo más a fondo: se trata de dar un viraje en las formas de lucha. Es decir, abrir un nuevo período táctico, en el cual en lugar de combinarse todas las formas de lucha, quedarán suspendidas las acciones de las guerrillas y las U.T.C. Para que las guerrillas y U.T.C. puedan replegarse en orden y el movimiento revolucionario introducir cambios en su táctica, son indispensables varias condiciones, especialmente mantener la unidad y cohesión internas, mantener una férrea disciplina, apoyar y ayudar al núcleo dirigente. Para lograr estas condiciones el Partido y la Juventud deberán actuar en dos direcciones. Primero, mediante la persuasión, suministrando toda clase de razones y argumentos políticos en respaldo a los nuevos cambios tácticos, discutiendo con serenidad a todos los que sea necesario convencer. Segundo, librando una activa lucha contra la tendencia aventurera y las provocaciones, síntesis de los dos documentos presentados por prominentes miembros del Buró Político a la consideración de ese organismo.

“La otra, mayoritaria en la base del Partido, pero debilitada en el seno de los organismos superiores de dirección que encabeza decididamente el compañero Douglas Bravo, que no solo se opone al viraje y cambio de táctica, sino que formula fuertes críticas a la forma como se ha venido conduciendo la lucha revolucionaria.

“Como se ve, el centro de las divergencias está en la lucha armada, a la cual se ha venido oponiendo desde el comienzo un grupo de dirigentes del Partido Comunista Venezolano.

“No me cabe la menor duda de que la sanción del compañero Douglas es el inicio del viraje, y que ella está orientada a eliminar, por las vías disciplinarias, a quienes se oponen a la apertura de un nuevo período táctico, en el cual, en lugar de combinarse todas las formas de lucha, quedarán suspendidas las acciones de las guerrillas y UTC.

“En una situación como esta, la decisión de ampliar los organismos integrados de dirección, incorporando a ellos a los cuadros más consecuentes y firmes, es un paso de importante magnitud.

“La mayoría del Buró Político se ha opuesto a esa medida y ha procedido a desautorizarnos públicamente, negando validez y legitimidad a los organismos constituidos.

“Nosotros, por nuestra parte, nos mantenemos firmes y hemos visto con gran simpatía la aparición de una fuerte corriente de opinión que nos apoya, tanto en los frentes guerrilleros, como en los organismos medios y de base del Partido Comunista Venezolano, además del respaldo encontrado en miembros del Comité Central, de los otros partidos miembros del FLN y en las unidades urbanas de las FALN.

“Está abierto un período de clarificación ideológica y de precisión del camino revolucionario. Hay un factor transitoriamente desfavorable en esta situación y que nos coloca en una situación de dificultad, es el problema de los recursos económicos, como consecuencia de haber sido el Buró Político el que ha venido ejerciendo el control de este rubro.

“Hasta hoy toda la ayuda para el movimiento revolucionario ha estado centralizada en ese organismo, y utilizada en función de su política, es decir, estrangulaba económicamente a los focos guerrilleros.

Continúa más adelante la carta:

“Hay una elevada moral en el ánimo de nuestros combatientes y una gigantesca firmeza en el nuestro. Estamos conscientes del presente cuadro de dificultades, pero estamos seguros de que las habremos de superar en el menor tiempo. La verdad se impondrá entre los escépticos y, con ello, un período luminoso asomará en nuestro horizonte. ¡Pa'tras ni pa'coger impulso!

“El portador puede aportar más detalles y precisar mejor algunas cosas.

“Marchamos hacia adelante, hacia la victoria. Luchar hasta vencer. Un fuerte abrazo de tu amigo, Fabricio Ojeda.”

04/06/1964